viernes, 23 de marzo de 2012

La Piconera Vinos en el Mercado de la Corredera

Aprovechando que Mara había ofertado copeo y tapeo para 4 a través de groupon, pues nos hemos acercado a su local en el mercado de abastos de la plaza Corredera. El mercado es mediano en tamaño, con un buen número de pescaderías y carnicerías, aunque tiene puestos cerrados.
Los mercados tuvieron su razón de ser en que eran los únicos que aseguraban la higiene de los productos, al tener como responsable a un veterinario. Pero actualmente con la higiene controlada desde el origen, la opción de compra más extendida son las grandes cadenas y supermercados. De todas formas, mi compra habitual es en el mercado de Ciudad Jardín, uno de los más baratos de la ciudad y con el encanto de ser un ente vivo, gracias a los gritos de los vendedores y a la bulla de los compradores.
El local que tiene Mara en el mercado, es un puesto transformado en tienda de degustación de vinos y con utensilios para preparar tapas al momento. A mi parecer le falta algo de decoración que le haga ser distinto a un puesto normal.
El cupón consistía en degustación de 5 vinos y 5 tapas para cuatro.
Comenzó con un vermut de Alvear, de color oscuro ya que no rojo, y que sería ésa la clasificación según Martini. Es un vermut muy agradable, buenos aromas y buena entrada. El servicio de este vermut debe ser con la botella fría, y no con un cubito de hielo. El acompañamiento aceitunas violadas de pepinillos para compensar el dulzor del vermut.
Le siguió fino 47, de la bodega Aragón de Lucena. Un vino sencillo que acompañó a unos mejillones al vapor, por cierto bien frescos, que ganaban claramente al fino.
Después un oloroso de la Cooperativa la Aurora, bien de olor pero excesivamente ácido en boca como descompensado y que se combinaron con almejas al vapor y reducción del mismo oloroso.
Continuó la degustación con una calamares a la plancha y un amontillado Pacorrito de Aragón. Este vino tiene aromas punzantes, algo de avellana, una solera bien asentada y en boca es agradable, se nota el alcohol y entra bien.
El final era un Pedro Ximenez, pero como por horario del mercado que es sólo por la mañana, nos acercamos antes de comer, por lo que dejamos sin probar el postre con el vino dulce.
Una visita agradable a Mara, como siempre atenta y dispuesta a explicar el vino, cómo hace las tapas, y su vida ajetreada. Por cierto, justo al lado hay otro puesto con la misma finalidad de degustación de vinos que Mara, aunque ese día los asistentes ibamos con el vale descuento.

viernes, 9 de marzo de 2012

Taberna los Mochuelos



Esta taberna está en el barrio de Santiago, en la calle de Agustín Moreno y cerca de las antiguas Lonjas. Esta calle siempre está concurrida y más en tiempo del Concurso de Patios, ya que algunos nuevos y hermosos patios se sitúan muy cerca.
La Taberna es espaciosa y dispone de un agradable patio y una pequeña bodega, que está al final del patio y que precisamente olía algo más de la cuenta a vino remontado. Este patio es muy fresco en verano, con abundantes macetas, y todos recordábamos haber estado disfrutando en él. Hay que decir que esta taberna en su momento estuvo de moda y fue muy concurrida. Todavía conservo el color y calor de tiempos anteriores. El vino es el de la casa y que nos comentaron no provenía siempre de la misma bodega, sino que iban buscando dónde el nuevo vino era de mayor calidad y no alterara las madres.
Sin embargo, el vino que tomamos estaba muy subido de color, con notas de acetaldehido, puesto que era más punzante o picante de la cuenta. En nariz lo primero que aparecen son notas de oloroso, especias y buen aroma. En boca es agradable, poco retrogusto y suave.
Del tapeo, correcto, pedimos unos boquerones y nos obsequiaron con un plato de carne guisada acompañada de arroz.

viernes, 2 de marzo de 2012

Taberna El Sibarita


Esta taberna está junto al vial Norte en C/ Manuel Cuellar Ramos, junto al hotel Córdoba Center, el de las luces de colores. Es un local reciente y que he visitado dos veces. En una primera con un vale de groupon, donde nos sirvieron 6 tapas variadas, bien conseguidas y con fundamento ya que hablamos de secreto ibérico, lomo, bacalao, además de otras más normales como salmorejo y boquerones.
En la segunda visita ya fuimos a copear y el sitio es agradable, espacioso y bien atendido, y ese día era el primero para una camarera que se desvivía en hacer las cosas bien aunque los nervios le fallaban. El vino es de Alvear y para lo cual abren botellas de 3/8 con lo que se aseguran que el vino no se altere, aunque más bien parece que los que por allí pasan no son asiduos al fino. El dueño nos dijo que iban a traer recipientes más grandes como los bag in box. Hay que decir que a pocos les agrada ese tipo de envase y prefieren el servicio del vino en botella, y si está cerca del hotel, pues es lógico que se aseguren una buena presencia del vino.
Este fino, de Alvear, ha cambiado y ahora tiene en su color unos toque de verdor o juventud que son de resaltar y el vino es fresco, con ligeros toques de madera, avellana y en boca tiene ligero amargor y buen retrogusto. Es de los mejores finos de la DO y es el más conocido dentro y fuera de la provincia.
Del tapeo, pues las raciones son normales pero las tapas están bien elaboradas y son abundantes, y muy recomendables. Nos agradó esta taberna.